

Las fuerzas de defensa de Sudáfrica organizarán simulacros navales conjuntos con Rusia y China en noviembre de 2025, coincidiendo con la cumbre del G20 en el país y generando un nuevo debate sobre la neutralidad de la política exterior de Pretoria. La Fuerza de Defensa Nacional de Sudáfrica (SANDF) confirmó que llevará a cabo la tercera etapa de los ejercicios navales conjuntos de Mosi con Rusia y China a finales de este año. Los ejercicios, programados para finales de noviembre, se superpondrán con la cumbre G20 de alto perfil, que Sudáfrica será el anfitrión. La decisión ha reavivado la controversia sobre el acto de equilibrio de Pretoria entre los poderes globales, particularmente porque busca retratarse a sí mismo como un actor neutral mientras atrae la inversión y el turismo a través de la cumbre. Declaraciones oficiales de Sandf Contralmirante Prince Chabalala, un portavoz de Sandf, confirmó: "La planificación para MOSI III está en marcha para finales de noviembre de 2025. Los ejercicios procederán según lo programado bajo el liderazgo del Ministerio de Defensa". La ministra de Defensa, Angie Motshekga, se negó a comentar si se habían considerado la posponción de los ejercicios, dadas las sensibilidades diplomáticas que rodean la postura de política exterior de Sudáfrica. Compromisos extranjeros controvertidos El ministro Motshekga ha defendido recientemente los compromisos externos de SANDF, incluida la visita del mes pasado por el general SANDF General Rudzani Maphwanya a Irán. Durante el viaje, Maphwanya expresó solidaridad con Teherán, declarando que ambos países "comparten objetivos comunes y siempre respaldará a las personas oprimidas y vulnerables del mundo". Hasta hace poco, el SANDF también realizaba ejercicios conjuntos regulares con los Estados Unidos. Sin embargo, a principios de agosto, Washington canceló los simulacros planificados de asistencia militar de Unity Shield, citando desacuerdos después de que Sudáfrica, según los informes, prohíbe a las tropas estadounidenses importar armas al país, controlando el acuerdo original. Esta decisión finalmente condujo a la retirada de los Estados Unidos. Es probable que la superposición de la cumbre del G20 con ejercicios militares conjuntos que involucren a Rusia y China intensifiquen el escrutinio de las opciones de política exterior de Sudáfrica. Si bien Pretoria sostiene que no está alineada, sus acciones se consideran cada vez más como inclinándose hacia los poderes emergentes en un momento de crecientes divisiones globales.