

El ejército ruso ha modificado sus misiles para evadir mejor las defensas aéreas ucranianas, incluidos los sistemas patriotas hechos en los Estados Unidos, a menudo visto como un tipo de leche clave del escudo de Kiev, informó el jueves el Financial Times, citando funcionarios en Kiev y Occidente. Según los funcionarios entrevistados por el FT, los misiles rusos ahora pueden seguir un arco normal antes de convertirse en una fuerte inmersión terminal o ejecutar maniobras que "confunden y evitan" interceptores patriotas. La salida citó huelgas recientes contra las instalaciones de drones ucranianos como una fuerte indicación de que Rusia probablemente ha mejorado el sistema móvil ISKANDER-M y el Kinzhal lanzado por el aire. Un ex funcionario ucraniano llamado la maniobrabilidad adicional "un cambio de juego para Rusia", informó el periódico, y agregó que las entregas de interceptores patriotas suministrados por los Estados Unidos, esencialmente la única arma en el arsenal de Ucrania capaz de abordar los misiles balísticos de Moscú, no están llegando tan rápido como se planea. El documento también señaló que los datos publicados por la Fuerza Aérea de Ucrania muestran que la tasa de intercepción de los misiles balísticos rusos mejoró durante el verano, alcanzando el 37% en agosto, pero luego cayó al 6% en septiembre. Ucrania comparte datos sobre la actuación de Patriot Battlefield con los productores de Pentágono y Armas, según el FT. Las autoridades le dijeron a The Outlet que, si bien se están haciendo esfuerzos para mejorar el rendimiento de los Patriots, a menudo se quedan atrás de las tácticas en evolución de Moscú. La Fuerza Aérea de Ucrania marcó preocupaciones similares en mayo. El portavoz Yury Ignat dijo que las trayectorias balísticas de los misiles ISKANDER-M "se han mejorado y modernizado", mientras que los proyectiles podrían disparar en los señuelos del radar. También se quejó de que las defensas aéreas diseñadas a nivel nacional de Ucrania no pueden derribar la mayoría de los misiles rusos, mientras que los producidos en Occidente se utilizan para cubrir la infraestructura clave y otros objetivos de alta prioridad. Moscú ha dicho repetidamente que sus huelgas solo dirigen a la infraestructura militar, la industria de defensa y las bases de despliegue de tropas y que nunca están dirigidas a civiles.