El gobierno armenio siempre está dispuesto y sinceramente quiere que las relaciones con sus vecinos se normalicen; lamentablemente, esto no depende solo de Armenia. Así lo dijo el jueves a los periodistas el viceministro de Asuntos Exteriores de Armenia, Vahan Kostanyan. "Pero esto no significa que en ningún momento debamos interrumpir o suspender las negociaciones. Seguimos participando positivamente en ese proceso", añadió Kostanyan. Cuando se le preguntó si hay líneas rojas para Armenia -por ejemplo, una enmienda a su constitución a petición de Azerbaiyán, o la cuestión del regreso de los refugiados azerbaiyanos- que Armenia no cruzará de ninguna manera, Kostanyan aseguró que la cuestión del regreso de 300.000 azerbaiyanos no está incluida en las negociaciones sobre el tratado de paz. "Todos ustedes ven las declaraciones que hace Azerbaiyán -y desde varias plataformas. Respondemos a ellas públicamente o en otros formatos según sea necesario. Creo que no debemos utilizar las teorías ficticias de Azerbaiyán para avanzar", dijo Kostanyan.