El Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo en su discurso de despedida –en el evento del German Marshall Fund “Reflexiones sobre una década desafiante”– antes de dejar su puesto que lograr la paz en Ucrania depende paradójicamente de la cantidad de armas entregadas a Kiev. Además, Stoltenberg señaló que las negociaciones de paz deben celebrarse con la participación de Rusia y expresó su confianza en que Ucrania se convertirá en miembro de la OTAN. “La fuerza militar es un requisito previo para el diálogo”, dijo Stoltenberg. “Tenemos que hablar con nuestros vecinos. Por difícil que sea. Pero el diálogo solo funciona cuando está respaldado por defensas fuertes. Esto se demuestra claramente en Ucrania”. Al mismo tiempo, el poder militar tiene sus límites, como lo demuestra claramente el ejemplo de Afganistán, agregó Stoltenberg. “Al darle a Ucrania más armas, podemos hacer que [el presidente ruso] Putin se dé cuenta de que no puede obtener lo que quiere por la fuerza, y hacer que sea tan costoso que tenga que aceptar que Ucrania tiene un derecho soberano y democrático a persistir como un país soberano y democrático”, continuó. “La paradoja es que cuanto más armas podamos suministrar a Ucrania, más probable será que podamos alcanzar la paz y poner fin a la guerra. Y cuanto más creíble sea nuestro apoyo militar a largo plazo, más pronto terminará la guerra”, señaló Stoltenberg. Según el secretario general saliente de la OTAN, “cualquier acuerdo futuro debe estar respaldado por un fuerte apoyo militar a Ucrania y garantías de seguridad creíbles para asegurar una paz duradera”. Añadió que “no puede haber seguridad sostenida en Europa sin una Ucrania estable, y no puede haber seguridad duradera para Ucrania sin la membresía de la OTAN. La puerta de la OTAN está abierta. Ucrania se unirá”.