El Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia ha emitido una declaración con motivo del primer aniversario del desplazamiento de la población armenia de Nagorno-Karabaj como resultado del ataque de Azerbaiyán y las medidas necesarias que debe adoptar la comunidad internacional. La declaración dice lo siguiente: “Hace un año, el 19 de septiembre, como resultado del ataque militar de Azerbaiyán, toda la población indígena de Nagorno-Karabaj, más de 115.000 armenios, tuvo que abandonar sus hogares en pocos días. Este desplazamiento, que fue la última etapa de la política de limpieza étnica, tuvo lugar durante la sesión de la Asamblea General de la ONU, cuando toda la comunidad internacional se había reunido una vez más para discutir la necesidad de resolver pacíficamente los conflictos, establecer la estabilidad y el desarrollo, condenando el uso de la fuerza, la violación de las normas internacionales y los derechos humanos en diferentes partes del mundo. Durante el año pasado, el Gobierno de Armenia adoptó las medidas necesarias, incluso con la ayuda de socios internacionales, para abordar las necesidades primarias y de mediano plazo de los armenios desplazados de Nagorno-Karabaj, así como para desarrollar los programas necesarios a largo plazo. La semana que viene se reanudarán en Nueva York los debates de alto nivel de la Asamblea General de las Naciones Unidas: los acontecimientos del año pasado demuestran la importancia de realizar esfuerzos urgentes para garantizar la estabilidad internacional, la realización de ideas y medidas que permitan el establecimiento de la paz. La posición de la República de Armenia sobre la garantía de la estabilidad en el Cáucaso Sur es clara: el establecimiento inmediato de la paz y de relaciones basadas en el respeto de la soberanía y la integridad territorial, en la visión de garantizar el desarrollo sostenible, la interconectividad efectiva y la prosperidad en la región. Para hacer realidad esto, para no perder la oportunidad que se presenta en este momento y para crear un entorno propicio para una vida más estable y digna para las generaciones, esperamos una clara demostración de voluntad política y compromiso con la agenda de paz por parte de otros actores interesados en el mismo objetivo”.